Solitarias, las calles de Hermosillo

Por Alan Rubio

Hermosillo.-  Este lunes 13 de abril, la ciudad de Hermosillo lució con menos transeúntes y vehículos en circulación por la entrada en vigor de la segunda fase de la estrategia “Quédate en Casa”, donde se establece como obligatorio que las personas con actividades no esenciales permanezcan en sus hogares debido a la contingencia sanitaria por la pandemia de COVID-19.

Las paradas de camiones presentaban poca afluencia de usuarios, al igual que pasajeros a bordo del transporte público.

En algunos cruces de los principales bulevares como Rosales, Vildósola, Luis Encinas, Morelos y Solidaridad se podían contar alrededor de 40 vehículos, cuando normalmente son más de cien.

Las personas que asistieron a los supermercados tuvieron que hacer filas de más de 20 personas para ingresar, ya que, desde la semana pasada, en algunos, se limitó el acceso para implementar el distanciamiento social.

Lo mismo pasó en los bancos donde los cuentahabientes con trámites financieros pendientes tuvieron que esperar por fuera de las sucursales.

Tanto el exterior como el interior del Mercado Municipal, donde cientos de hermosillense se reúnen día con día, se observaba a pocas personas, de todas las edades, aunque predominaban los adultos mayores. Poca clientela acudió a este inmueble donde solo operan 20 locales considerados esenciales.

Muchos establecimientos no esenciales como zapaterías y de venta de ropa del Centro de la ciudad continuaban abiertos al público, pero sin clientela.

En este sector se observó patrullaje de la Policía Municipal invitando a las personas a resguardarse en sus casas, algunos ciudadanos agradecían la sugerencia, pero otros respondían que andaban en la calle porque estaban enfadados del encierro en sus casas.

Conforme transcurrían las horas del día, disminuía la cantidad de gente y la circulación de vehículos, las calles se iban vaciando.

El llamado de las autoridades estatales de Salud continúa, piden a los sonorenses resguardarse en sus casas, y confían en que en algún momento la conciencia de los ciudadanos los haga acataran la instrucción.